
¿Tristeza o depresión posparto? Aprende a reconocer las señales y pide ayuda a tiempo
Acabas de dar a luz, tu cuerpo y tu mente atraviesan uno de los momentos más intensos de tu vida, y lo que antes era rutina, ahora parece un caos. No duermes bien, te sientes desbordada y, a veces, incluso culpable por no estar "disfrutando" como se supone que deberías. Si te estás preguntando si esto es normal o si puede tratarse de algo más serio, no estás sola. Y lo más importante: no estás fallando como madre.
¿Qué es la tristeza puerperal?
Durante los primeros días después del parto, es muy común experimentar lo que se conoce como tristeza puerperal o "baby blues". Ocurre en hasta el 80% de las madres y se debe, en gran parte, a los cambios hormonales, el cansancio extremo, el estrés y la adaptación a una nueva vida con un recién nacido.
Se manifiesta con:
Llanto fácil
Irritabilidad
Cambios de humor
Dificultad para dormir
Sensación de agobio
Suele aparecer entre el segundo y quinto día tras el parto y desaparece en una o dos semanas sin necesidad de tratamiento específico, más allá del descanso, el apoyo emocional y la comprensión.
¿Y cuándo se convierte en depresión posparto?
A veces, los síntomas no desaparecen o incluso se intensifican con el paso del tiempo. En estos casos, podrías estar ante una depresión posparto, una condición médica seria que requiere atención profesional.
A diferencia de la tristeza puerperal, la depresión posparto:
Dura más de dos semanas
Interfiere con tu capacidad para disfrutar del bebé o cuidarte a ti misma
Incluye sentimientos persistentes de tristeza, ansiedad, irritabilidad o vacío
Puede venir acompañada de pensamientos negativos recurrentes o incluso autolesivos
La depresión posparto puede surgir semanas o incluso meses después del parto, y no hay una única causa. Los cambios hormonales, antecedentes personales, la falta de sueño o el aislamiento pueden influir.
Escala de Depresión Posnatal de Edimburgo (EPDS)
Una de las herramientas más utilizadas para detectar la depresión posparto es la Escala de Depresión de Edimburgo, un cuestionario validado que te ayuda a identificar cómo te estás sintiendo realmente.
¿Cuándo realizarlo? Entre la semana 6 y la 8 después del parto
¿Cómo responderlo? Elige la respuesta que mejor refleje cómo te has sentido en los últimos 7 días
Puedes acceder a la versión oficial aquí
¿Qué hacer si tu puntuación es alta?
Si obtienes 10 puntos o más en el test, es recomendable hablar con un profesional de la salud. Pero incluso si no llegas a ese número y sientes que algo no va bien, confía en tu intuición y pide ayuda. Nadie mejor que tú para saber cuándo necesitas apoyo.
No estás sola. Un estudio internacional promovido por Nestlé reveló que más del 25% de las madres primerizas experimentaron tristeza o síntomas depresivos tras el parto. Es mucho más común de lo que pensamos, aunque pocas veces se habla de ello con naturalidad.
¿Dónde encontrar apoyo?
Tu médico de cabecera, ginecólogo o matrona pueden ayudarte a identificar si estás pasando por una depresión posparto y guiarte hacia un tratamiento adecuado.
Grupos de apoyo posparto: Compartir tu experiencia con otras madres que están pasando por lo mismo puede ser un gran alivio emocional.
Líneas de atención telefónica: Existen ONGs y servicios de salud que ofrecen acompañamiento psicológico gratuito y anónimo.
Recursos online: Puedes consultar artículos, foros de maternidad y redes sociales para sentirte acompañada, siempre que contrastes la información con fuentes fiables.
Recuerda: pedir ayuda también es un acto de amor
Ser madre no significa dejar de cuidarte. Al contrario: cuanto mejor estés tú, más podrás disfrutar de tu bebé. La depresión posparto no es un signo de debilidad, ni mucho menos de que estés fallando. Es una condición médica que puede tratarse, y cuanto antes la identifiques, más fácil será superarla. Si tienes dudas, habla con alguien. Comparte cómo te sientes. Y, sobre todo, no te aísles.
Porque sí: esto también pasará. Y, con el apoyo adecuado, volverás a sentirte tú misma, fuerte, segura y capaz. Porque lo eres.

NIDINA Cuidarte para cuidarles