Desarrollo del feto de 7 semanas de embarazo
¡Con los primeros músculos ya en su sitio, durante la 7 semana de embarazo, tu bebé empieza a moverse un poco, aunque involuntariamente.
Sus piernas y brazos están creciendo, se le están formando los codos y los dedos empiezan a parecer de verdad. Todo su equipamiento visual también se está asentando. El nervio óptico es prácticamente funcional y empieza a reaccionar a los cambios de luz, incluso los más leves. ¡Qué montón de cambios se están produciendo esta 7ª semana de embarazo!
El desarrollo embrionario es muy rápido: en una semana el embrión ha pasado de 4 a 12 mm. Desde su formación, los cambios son increíbles. En este momento también empieza el desarrollo cerebral fetal: se forman neuronas y el cerebro ya tiene dos hemisferios. El corazón tiene dos cámaras (tendrá cuatro). Se forman los intestinos. Y la cara adquiere una forma más humana, apareciendo las fosas nasales.
Paralelamente se va formando la placenta, que le servirá al feto para obtener nutrientes y oxígeno. De hecho, la placenta es el único tejido fetal que feto y madre comparten: la mitad de sus genes son del padre. Eso hace que sea un tejido “raro” para el sistema inmunitario de la madre, como un transplante de otra persona. Pero el cuerpo es sabio: las células de la placenta producen unas proteínas que se comunican con las defensas de la madre y éstas protegen la placenta en vez de atacarla.
Cambios en el cuerpo
El antojo de los encurtidos es algo más que un simple cliché del embarazo. 
Cosas que antes del embarazo te encantaban ahora te pueden repeler. Incluso tu perfume favorito puede resultarte ahora espantoso. Tus hábitos podrían cambiar debido a uno de los cambios en el cuerpo durante la semana 7 de embarazo, la alteración de los niveles hormonales, que afectan a los sentidos del olfato y del gusto. Estos nuevos antojos pueden incluir hasta pepinillos. Por desgracia, también puedes experimentar el efecto contrario al antojo. Muchas futuras mamás tienen muchísimos problemas con las náuseas, sobre todo por la mañana temprano.
Qué comer y qué no
A las 7 semanas de embarazo puede ser un buen momento para añadir un tentempié a tus comidas diarias. Tu cuerpo, bajo la influencia de las hormonas naturales, ya está haciendo planes para el futuro. Necesita almacenar tejido adiposo para empezar a prepararse para los meses finales de gestación y, después, para poder dar el pecho. Un simple tentempié de unas 200 calorías, el equivalente a 1/6 de una baguette con mantequilla y una loncha de jamón, o un yogur de frutas y una galleta, es suficiente para satisfacer tus necesidades energéticas y las de tu bebé.
Consejos para embarazadas
¿Te has encontrado mal a media tarde? El malestar “matutino” puede presentarse a cualquier hora del día. Esta sensación de náuseas puede estar provocada por la falta de azúcar en la sangre. Una vez te encuentres mejor, intenta comerte el tentempié del que hablábamos antes. Si eres propensa a vomitar, bebe un poco de zumo de manzana o de uva para reponer la pérdida de líquido o chupa un poco de hielo picado. El jengibre es un buen remedio para las náuseas, ya sea en forma de galletas o en infusión. Si compras preparados de jengibre en herbolarios o farmacias, debes asegurarte de que sean aptos para embarazadas. Díselo también al médico. Te podrá sugerir otras ideas.
