27 semanas de embarazo

Desarrollo del feto

Llegadas las 27 semanas de embarazo, tu bebé aún necesita crecer más. Su sistema respiratorio tiene todo lo que necesita para respirar, pero aún es demasiado inmaduro para hacerlo por sí solo.

Sus pulmones están divididos en más de 17 niveles y forman el árbol bronquial, pero para el bebé sería muy difícil respirar si naciera en este momento. De hecho, los sacos aéreos aún no están bien desarrollados y hasta la semana 35 del embarazo no hay suficiente surfactante (sustancia que recubre el interior de la superficie alveolar para facilitar la apertura de las células y prevenir la flacidez). Por tanto, relájate mientras tu bebé crece un poquito más.

Cambios en el cuerpo

Han pasado 29 semanas desde que tuviste la última regla, sin duda un gran descanso para la mayoría de mujeres. Veintinueve semanas de amenorrea quiere decir que llevas 27 semanas de embarazo. ¿Has intentado imaginarte cómo de grande es ahora tu bebé? Pues, mide cerca de 34 cm desde la punta de la cabeza hasta los dedos de los pies. Para que te hagas una idea, su cabeza es más o menos como una naranja pequeña. ¡Seguro que ya es toda una preciosidad!

Por otro lado, puede ser que empieces a notar contracciones durante esta etapa. Este síntoma, llamado contracciones de Braxton Hicks, consiste en encogimientos del útero para preparase para el parto y son totalmente naturales e indoloras.

Qué comer y qué no a las 27 semanas de embarazo

¿Te cuesta dormir bien? No eres la única. Por desgracia, es bastante normal. Aún así, puedes probar algunos consejos nutricionales para mejorar la calidad de tu descanso. Si la razón de que no duermas bien es que sufres de reflujo y acidez estomacal, puedes probar a colocar otra almohada, ¡o incluso a dormir casi sentada! Además, intenta que tus cenas sean más ligeras, para no irte a la cama con el estómago muy lleno. Si después tienes hambre, prueba con un yogur, una pieza de fruta que no sea ácida o una rebanada de pan integral con mermelada.

Consejos para embarazadas

Aunque seas ya una mamá experimentada, te puede resultar útil asistir a clases preparto. Los expertos descubren constantemente información nueva que puede ayudarte durante el embarazo. Además, los métodos de parto cambian con frecuencia. Sé consciente de los cambios que se producen en tu cuerpo durante el embarazo y el parto, y aprende algunas buenas técnicas de relajación para frenar la ansiedad cuando se acerque el momento. ¿Más buenas razones para apuntarte a un curso de preparación al parto? En caso de que esta vez vayas a dar a luz en un sitio nuevo, o si hace bastantes años desde tu último parto.